¿Qué es y en qué consiste la terapia psicológica? Técnicas, metodología y tipos de terapia
A veces cuando escuchamos la palabra terapia psicológica nos echamos a temblar y nos parece que nuestro problema es más grave de lo que realmente es.
Ir a terapia consiste en realizar un tratamiento basado en la ciencia cuyo propósito es conseguir el bienestar psíquico de las personas, abordando las diferentes conflictividades psicológicas a través de relación psicoterapeuta-paciente.
La vinculación terapéutica entre profesional-paciente es el denominador común a todas las corrientes y la variable principal para la mejoría. Si no existe un trato cercano y el psicólogo se gana la confianza del paciente es imposible que se logre un avance.
Cuando una persona se decide a pedir ayuda y acudir a terapia psicológica están intentando vencer sus miedos y superar los problemas que alteran su mente. Los motivos pueden ser muy diversos: traumas, fobias, miedos, problemas de pareja, hijos rebeldes, fracaso escolar, dependencia emocional, y muchos otros en los que el psicoterapeuta aplicará la estrategia más adecuada a cada caso.
Es importante no olvidar que la psicoterapia o terapia psicológica debe ser dirigida y aplicada por profesionales de la salud con formación en psicología, y especialización en el área clínica.
¿Cuándo debes ir a terapia psicológica?
Esta pregunta es bastante frecuente ya que siempre pensamos que no es para tanto y podemos resolver nuestros problemas sin ayuda.
Sin embargo, estamos equivocados e ir a terapia psicológica no es más que tener la iniciativa de querer enfrentar aquello que nos hace daño y evolucionar como personas.
Algunas pistas de que ha llegado el momento de enfrentar la realidad e ir a terapia son:
▷ Ninguna decisión que has tomado sobre tu conducta parece haber dado resultado
▷ Tus amigos o familiares no quieren escucharte
▷ Abuso de drogas o alcohol
▷ Tus conocidos se preocupan por ti y te recomiendas que vayas a terapia psicológica
▷ No dejas de pensar en lo negativo
▷ Piensas que todo el mundo está en tu contra y ofreces una respuesta agresiva
▷ Te cuesta dormir
▷ No disfrutas de las cosas y nada te motiva
9 Tipos de terapia psicológica con las que volverás a ser tú
Decidir cuál es la terapia más adecuada para un paciente es muy importante ya que dependiendo como sea su adaptación los avances serán mayores.
Ninguna persona es igual a otra, por lo que cada terapia psicológica debe ser adaptada al cliente de forma personalizada.
Todos los tratamientos psicológicos con independencia de los distintos enfoques buscan en definitiva un objetivo común: mejorar el bienestar de los pacientes, para conseguir que los problemas de la vida se conviertan en retos y no en amenazas.
Cada modelo de terapia psicológica se vale de distintas técnicas para ajustarse a los trastornos psicopatológicos de los pacientes, y puede utilizar métodos específicos ajustados al paciente en cuestión y al momento concreto por el que está pasando.
Hay tantas terapias y tantas variaciones de las mismas que mencionarlas todas es imposible. En este post te comentamos cuáles son las más utilizadas en pacientes con diferentes problemas en la actualidad.
Terapia conductual
Esta terapia psicológica centra su foco de atención en el análisis de los comportamientos aprendidos y su repercusión en la vida de las personas, ayudando a desprenderse de ciertos condicionamientos para adquirir conductas más integradas y positivas.
Parte de la premisa de las conductas pueden objetivamente tratarse, trabajan mediante técnicas como la deshabituación, modelado, condicionamiento clásico, etc.
Resulta muy eficaz para resolver problemas de dependencia y fobias.
Terapia cognitivo-conductual
La clave del éxito de este tipo de terapia psicológica es centrar su atención en trabajar junto al paciente en la comprensión y modificación de sus patrones de pensamiento y de conducta.
Es heredera de la anterior pero tiene en cuenta la parte más cognitiva o mental de cada persona. Es decir, tiene en cuenta cómo se siente en cada faceta de la terapia.
Parte de la idea de que las personas nos vemos condicionadas no sólo por los estímulos externos objetivos, sino en cómo pensamos esos estímulos.
La función de psicólogo es desvelar los esquemas mentales y los significados conceptuales a la persona. De esta forma, tendrá una idea de cómo el paciente está interpretando la realidad y cuál es el punto exacto desde el que hay que empezar a hacer cambios.
Así, en la terapia cognitivo-conductual el pensamiento y la conducta van íntimamente relacionados ya que pueden verse modificados mediante esta intervención psicológica.
Lo fundamental es identificar los problemas y establecer cuál es la actitud del paciente frente a ellos. Una vez se lleva a cabo este proceso el psicólogo establece un guion de cambio sobre los pensamientos que presentan patrones disfuncionales.
La ventaja de esta terapia es que, después de mucho entrenamiento, la persona tiene la llave mágica que le ayudará a gestionar sus problemas evitando el daño personal.
Este tipo de terapia psicológica reporta una gran eficacia en el tratamiento de trastornos de ansiedad, depresión, fobias, y procesos traumáticos, entre otras psicopatologías.
Terapias psicoanalíticas
El punto de partida de este tipo de terapia psicológica son los conflictos psicológicos cuyo origen es una etapa anterior, generalmente la infancia.
A través del psicoanálisis se consigue que los conflictos inconscientes afloren a la conciencia.
Este tipo de enfoque resulta especialmente útil en el tratamiento para depresión, fobias y traumas de la infancia en los que se estudia el impacto que determinados acontecimientos han quedado grabados en el subconsciente influyendo negativamente en la conducta y pensamiento posterior.
Su gran ventaja es que es una terapia profunda que trasforma la parte estructural no quedando en la mera modificación de síntomas superficiales.
Terapias humanistas
El objetivo primordial es conseguir el crecimiento personal, la autorrealización, y maximizar el potencial de las personas, desde una visión plenamente optimista de la psicoterapia.
Para ello reúnen una gran variedad de técnicas y estrategias terapéuticas, partiendo del enfoque planteado por C.Rogers.
A las terapias humanistas se las conoce como de “3ª corriente” tras la psico-analíticas y las cognitivo conductuales.
Este tipo de terapias psicológicas pretende dar alternativas dando un enfoque de esperanza al momento que está viviendo el paciente.
Terapia Gestalt
La Terapia Gestal está englobada dentro de las terapias humanistas y parte de la idea de que los pensamientos, sensaciones, emociones y conductas forman un todo, de la persona, y por tanto no pueden abordarse de forma aislada.
Lo que se pretende con este tipo de terapias es que el paciente afronte sus propios problemas y adquiera más seguridad en sí mismo. Es decir, se centra en el aprender a mantener la atención en el “aquí y ahora” para así estar más presentes y poder ser más responsables de lo que vivimos.
Cuando más conscientes somos de nosotros mismos, más libres a la hora de tomar decisiones y por lo tanto, más plenos.
Terapia existencial
Esta terapia psicológica se centra en trabajar desde el momento presente los conflictos mentales limitantes que interfieren en el avance vital de las personas, desde el análisis de la propia existencia, potenciando la capacidad de asumir responsabilidades y nuevas metas a través de estrategias que ayudan a vivir una vida más real y auténtica.
Viktor Frank, es uno de los autores más importantes de este enfoque, habiendo escritos libros tan famosos y trascendentes como “El hombre en busca de sentido”.
Terapia sistémica
Es conocida también como terapia familiar. Por tanto, su objetivo es mejorar la relación y la comunicación entre los miembros de la unidad familiar, centrándose principalmente el trabajo en las personas que forman ese sistema en concreto y presentan un patrón de comportamiento desadaptado.
Hace énfasis en cómo se da la comunicación entre los miembros, además de las alianzas y los papeles que se juegan dentro de los sistemas concretos.
Terapia breve centrada en soluciones
Estos tipos de terapias buscan soluciones a problemas concretos de una forma concreta.
Fomenta el autoconocimiento y potencia los puntos fuertes personales. Es útil para tratar problemas de pareja, familiares o inseguridades de uno mismo.
Terapias artísticas
Más que una terapia en sí es una técnica para descubrir la forma de pensar del individuo a través de diferentes representaciones artísticas.
El arte se convierte en un canal de comunicación menos forzado, que aporta mucha información, a la vez que fluyen y se liberan emociones, potenciando el auto descubrimiento.
Entre las posibilidades que ofrecen las terapias artísticas están la musicoterapia, drama terapia, y arte terapia.
Esperamos que te haya gustado nuestro post sobre las diferentes terapias psicológicas que existen. No dudes en ponerte en contacto con nosotros si tuvieras cualquier duda.